El Imperialismo, las revoluciones y contrarrevoluciones del siglo XX
El Imperialismo
El imperialismo es una actitud adoptada por un estado
para pretender colocarse por encima de otros estados o comunidades.
El imperialismo se puede entender como el dominio que
ejercen las naciones más poderosas sobre otras más débiles. Pero generalmente
se denomina imperialismo al proceso de expansión económica que tuvo lugar en
Europa a mediados del siglo XIX, sobre todo a partir de 1870, y éste fue
conocido como imperialismo librecambista.
A partir de finales del siglo XIX el imperialismo se
caracterizó sobre todo por la dominación económica impuesta por las potencias
sobre naciones más pobres, ya que la dominación política cada vez fue más
puesta en duda.
A finales del siglo pasado y comienzos de este (XXI) ,
se ha calificado como imperialista la política exterior de Estados Unidos y su
intervencionismo en diversos conflictos, siempre desde voces ideológicamente
críticas con la línea política estadounidense, siendo esta una acepción moderna
estrictamente ideológica de un término cuyo significado más clásico se ciñe a
formas de dominio en su sentido más estricto.
El imperialismo, tiene un sentido más amplio( si se
compara con el colonialismo) que remite al control o influencia ejercido sobre
otra región, sea o no de forma oficial y directa, e independientemente de que
afecte al terreno económico o político.
Definiciones sobre
Imperialismo
El término imperialismo hace referencia a la actitud,
doctrina o acción que conduce al dominio de un estado sobre otro u otros
mediante el empleo de la fuerza militar, económica o política.
Durante el último tercio del siglo XIX las potencias
europeas y algunas extraeuropeas (USA y más tarde Japón) desarrollaron una
política de expansión colonial acelerada que ya venía gestándose desde
comienzos de siglo. Esta nueva fase del colonialismo, que recibe la
denominación de imperialismo, tendía a la formación de grandes imperios y
constituyó una constante fuente de conflictos que desembocaron en la 1ª Guerra
Mundial.
Los cambios en el Sistema Mundial

En la fisonomía interna, la ocupación total de las
tierras dentro de la frontera pampeana pondría punto final al proceso
tradicional de crecimiento de la producción rural destinada a la exportación,
volcando la atención en la ocupación de nuevas tierras. Pero el rápido aumento
de la producción agropecuaria y de las exportaciones era inadmisible sin la
conquista y explotación de nuevas tierras cercanas a la zona pampeana que
contasen con mayores instalaciones de servicios básicos (especialmente
transporte con conexión al puerto para las producciones exportables). A partir
de aquí, las exportaciones dependieron del cambio tecnológico y la mecanización
de las explotaciones rurales.
Por otro lado, el tamaño y la complejidad de la
estructura económica argentina imponía la integración de la actividad
productiva conjuntamente con el desarrollo industrial.
En el plano internacional, se alteró el papel de la
economía mundial con la pérdida de dinamismo de la demanda de productos
agropecuarios, especialmente de orden primario.
Esta combinación de circunstancias, internas y
externas, determinó que se derrumbara el rol hegemónico del sector agropecuario
de la región pampeana como actividad promotora del desarrollo nacional. Además,
trajo como consecuencia el quiebre entre el sistema argentino y su vinculación
con el exterior que le aportaba a nuestra economía importantes cobros generados
en las exportaciones.
En la presente recopilación y clasificación de datos
referentes a la historia económica de nuestro país, se analizarán los cambios
producidos en la economía mundial, que luego influiría de manera notoria en el
desarrollo de la República Argentina de los últimos años.
La crisis económica de 1930
La economía y su consecuencia a nivel mundial
A partir de la segunda mitad del siglo XIX, el
progreso técnico había acelerado la expansión del comercio internacional, el
flujo internacional de capitales y las corrientes migratorias. La crisis de
1929 pone punto final a este proceso, debilitando las relaciones económicas
internacionales.
La depresión mundial de 1929 provocó, en los países
industrializados, la disminución de sus importaciones y llevó a estos países a
adoptar medidas proteccionistas para afrontar tal efecto.
La contracción del comercio internacional, la
disminución de los ahorros en países exportadores de capitales y la dificultad
de los países deudores para pagar sus deudas, provocaron una gran disminución
en lo que respecta a la corriente internacional de capitales, afectando en
especial a los países basados en la producción y exportación de productos
primarios.
Simultáneamente, decrece el porcentaje de inversiones
en las obras de infraestructura destinadas a proporcionar servicios básicos al
sector exportador o necesarios para la economías internas en crecimiento,
debido a las dificultades financieras de los gobiernos de los países deudores.
A través de los diferentes factores mencionados con
anterioridad, se produjo una ruptura, durante la década de 1930, del conjunto
de relaciones dentro de las cuales se había desarrollado el proceso de
integración de la economía mundial a partir de la segunda mitad del siglo XIX.
Estos factores interfirieron en las rutas tradicionales de comercio y en el
funcionamiento de los mercados internacionales de capitales.
La transformación económica en Argentina
A comienzos de 1930, nuestro país había adquirido ya una dimensión económica considerable en términos de población e ingreso por habitante. A través de esto, se produce un aumento en la demanda interna y una simultánea diversificación de la misma, que sin embargo, no tenía repuesta en la estructura productiva debido al rudimentario desarrollo industrial. Esto se debía a que existía un alto grado de abastecimiento externo de productos manufacturados para consumo e inversión. De cualquier forma, en 1930, ya no se puede hablar de una base económica fundada en el modelo primario exportador; se requería la incorporación de la industria como elemento dinámico del crecimiento y transformación de la estructura productiva.
A los cambios de la realidad interna se añadieron los
cambios en la economía mundial que, hacia 1930, profundizaron la crisis de
modelo agroexportador, restringiendo severamente las exportaciones
agropecuarias.
El país, debido a su incapacidad, no pudo emitir
respuesta alguna para enfrentar los nuevos problemas y formar una economía
industrial avanzada. Esta incapacidad determinó el progresivo aislamiento de la
economía argentina respecto de las corrientes dinámicas del comercio y las
inversiones internacionales. Este aislamiento fue acompañado por una drástica
reducción de inversiones en el país.
El viejo esquema de la dependencia externa constituye
un obstáculo grave al crecimiento y somete a la economía a graves tensiones
como las crisis cíclicas y la alta tasa de desempleo.
Neocolonialismo:
Las nuevas conquistas territoriales
en África,
Asia y Oceanía
Asia y Oceanía
ÁFRICA
Continente, parte del Viejo Mundo, con 30.281.812 km2,
más de 600.000.000 h en 1990 y 20 h/km2, se extiende en forma de pera invertida
en unos 8000 km de N a S por unos 7500 de E a O. Los mares Mediterráneo y Rojo
la separan de Europa y Asia, respectivamente, si bien a esta última está unida
por el istmo de Suez. El océano Atlántico la baña por el O y el Índico por el E
y S.
ASIA
El más extenso y populoso de los continentes, parte
del Viejo Mundo, con 44.178.785 km2 -casi un tercio de las tierras emergidas-,
2.785.299.000 h -más de la mitad de la población del planeta- y 63 h/km2. Está
situada dentro del hemisferio boreal,salvo la mayor parte de Indonesia, que
queda al S del ecuador. Mide un máximo de unos 9600 km de E a O, por alrededor
de 8000 de N a S. La separación de Europa es convencional: los montes Urales y
del Cáucaso, ambos en la ex URSS; con África el límite es el istmo egipcio de
Suez, cortado hoy por el canal de este nombre; de América la aísla el estrecho
de Bering. Por el N, Asia está bañada por el océano Glacial Ártico, por el E
por el Pacífico y por el S por el Índico.
OCEANÍA
El más pequeño de los continentes, en cuanto a tierra
emergida se refiere, con 8.945.724 km2 y una población de solo 29.128.000 h.
Situada aproximadamente entre los meridianos 130° E y O de Greenwich, incluye
la mayor isla de la Tierra, Australia, varias otras islas importantes y
millares de otras islas, islotes y atolones. Convencionalmente, suele agruparse
a los conjuntos insulares en Australasia, Micronesia, Melanesia y Polinesia.
Australia es el gigante oceánico: 86 % del territorio del continente y 60 % de
la población; siguen Papúa Nueva Guinea (5 % y 12 %, respectivamente) y Nueva
Zelanda (3 % y 12 %). Los otros ests. independientes, todos ya mucho menores,
son: Salomón, Fiji, Vanuatu, Samoa Occidental, Kiribati, Tonga, Tuvalu y Nauru.
Son dependencias australianas las islas de Norfolk y
Macquarie; neozelandesas las de Cook, Niue y Tokelau; británica, Pitcairn;
francesas, Nueva Caledonia, Wallis y Futuna, Polinesia Francesa y Clipperton;
estadounidenses, Guam, Hawai, Midway, Samoa Americana, Wake, Marianas
Septentrionales, Estados Federados de Micronesia,Palau (Belau) y Marshall;
Indonesia, Irian Occidental (o Nueva Guinea Indonesia); y chilenas,Pascua y
Sala y Gómez.
Las alteraciones de la vida política
La expansión del
modelo de las democracias liberales, las Revoluciones y las Contrarrevoluciones
Distinción entre Imperio informal, neocolonialismo e imperialismo
El concepto de imperialismo informal o neocolonial, se refiere a la influencia y el predominio que una potencia ejerce sobre un país de manera económica, social y cultural. Se habla de imperialismo informal, por ejemplo, cuando los intereses de una potencia dominan la economía de otro país, ya sea porque sus empresas controlan las actividades mas significativas (por ejemplo son dueñas de los principales yacimientos petrolíferos) o bien porque esa potencia es la principal compradora de los bienes que exporta el país dominado. En estos casos, el país dominado es políticamente independiente, pero sus decisiones económicas están fuertemente condicionadas por los intereses de la potencia dominante.
La diferencia radica en que en que se caracteriza la segunda por un control indirecto
El imperialismo es una doctrina política que pretende situar por encima de otros Estados o comunidades al propio. En relación al colonialismo y neocolonialismo es la base de estos, porque con frecuencia existe un IMPERIO que coloniza determinado territorio o población, habiendo así anexiones de territorios y formación de colonias; y es también la base de lo que significa la colonización.
La diferencia con ambos es que el colonialismo y el
neo..., son procesos subyacentes al de un imperialismo.
Las alteraciones de la vida política
Uno de los
acontecimientos más relevantes de nuestro tiempo es la irrupción del
neoliberalismo en la escena pública. Tan relevante como inesperada; hace dos
decenios nadie hubiera pensado en el renacimiento del liberalismo. Sin embargo,
hoy están en pleno auge las políticas que reducen las funciones y los poderes
del Estado, la venta de empresas paraestatales y la contracción del gasto
público. En correspondencia, observamos una revalorización de las ideas que
condenan la igualdad y la justicia y que en su lugar enarbolan la libertad
individual. En suma, estamos presenciando el desmantelamiento del Estado
Desarrollista-Reformista y la instauración del Estado Neoliberal.
Estado Benefactor
- Estado Liberal

Una vez que se
batió en los dos frentes, o sea, contra la ausencia de Estado y contra la
presencia de un Estado ampliado, Nozick presenta su concepción del mejor de los
mundos posibles, su utopía. Por tal motivo se remite a las tesis clásicas del
liberalismo según el cual todos los hombres son distintos y tienen diversidad
de objetivos. Entonces cada individuo tiene una imagen diferente de aquello que
debe ser lo mejor. Las personas difieren en temperamento, interés, capacidad
intelectual, aspiraciones, tendencias naturales, especulaciones y la clase de
vida que desean seguir. De allí que la utopía en general debe ser el marco para
las utopías particulares, un lugar donde cada quien pueda perseguir sus propios
objetivos, pero donde nadie pueda imponer su criterio sobre los demás.
Ahora bien, a
diferencia de las corrientes utópicas que plantean un modelo ideal acabado,
Nozick propone ciertos mecanismos de diseño y de filtro, esto es, instrumentos
que prueben y corrijan el modelo hasta que se llegue a una condición
satisfactoria. "Ninguna pauta es impuesta a cada uno, y el resultado sería
una sola pauta si, y solo si, cada uno, voluntariamente, decide vivir de
conformidad con esa pauta de comunidad". Concluye que el marco de la
utopía que diseñó es equivalente al "Estado mínimo".
Revoluciones y contrarevoluciones del siglo XX
La Revolución Mexicana
La revolución mexicana tuvo muchos caudillos, se
garantizó el 20 de Noviembre, pero ya se había iniciado el día 17 en la casa de
los hermanos Serdán, dentro de la revolución brillaron infinidad de planes, uno
de los que más eco tuvo dentro del grueso de la población campesina fué la
frase de Emiliano Zapata, TIERRA Y LIBERTAD , dicha frase se puede decir que
fué el himno de muchos de los campesinos que tomaron parte en la lucha contra
la dictadura, se puede localizar dentro del famoso PLAN DE AYALA, formulado por
Emiliano Zapata.
La tiranía del gobierno, los tratos infrahumanos de
que eran objeto, los campesinos, las inhumanas jornadas de trabajo, y las
pésimas condiciones de trabajo de los obreros, de todos estos personajes que
lucharon juntos para mejorar sus condiciones de existencia, y sus perspectivas
de un futuro mejor, destacaron algunos por sus ideas progresistas, otros por su
tenacidad para combatir en el campo de batalla, de los principales podemos
citar algunos que también dieron a la revolución sus planes, como Venustiano
Carranza y su PLAN DE GUADALUPE, Francisco I. Madero y su PLAN DE SAN LUIS
POTOSI, llamado así para distinguirlo de San Luis Missouri, Francisco Villa
tenía en la lucha armada, los hermanos Carmen, Aquiles y Máximo Serdán, Felipe
Angeles, Jose Ma. Pino Suárez, los hermanos Flores Magón, Belisario Domínguez,
Alvaro Obregón y muchos otros.
Debemos tener en cuenta que paso mucho tiempo para que
se dieran las condiciones necesarias para que no fuera un fracaso, mucho tiempo
de organización, muchísimas muertes por todas partes de la República Mexicana,
donde también hubo muchos destierros de personas que se oponian al régimen de
Porfirio Díaz.
Una vez que terminó la lucha armada, se procedió a
organizar políticamente el país, se cambió al Presidente, pero se continuo con
el mismo gabinete político, lo que originó que empezara una Época de Anarquía
Política en la que se cambiaba de personas dentro de la política cuando
llevaban poco tiempo en el poder, ésta terminó con la llegada de Cárdenas a la
Presidencia.
Los movimientos campesinos y la reforma agraria
Prácticamente desde la época de la independencia, el campo nicaragüense, como el de toda América Latina, se había caracterizado por una distribución de la tierra extremadamente injusta. Una pequeña minoría de terratenientes concentraba la mayor parte de las tierras, que además solían ser las más aptas y productivas. Por el contrario, la gran masa de campesinos se repartía un porcentaje mínimo de tierra y buena parte de ellos incluso carecía de cualquier propiedad. Las tierras en manos de los campesinos solían ser, además, las de peor calidad.
Los campesinos nicaragüenses nunca aceptaron pasiva y
sumisamente su suerte. Fueron los protagonistas de los sucesivos levantamientos
liberales que salpicaron los primeros 100 años de historia del país. Sin
embargo, también fueron los primeros en ser traicionados por cada gobierno que
solicitaba su apoyo. Acostumbrados a poner siempre los muertos para no
conseguir nada, el grito revolucionario de Sandino contra la oligarquía y el
imperialismo galvanizó el alma herida de los campesinos y les puso en pie de
guerra durante casi ocho años. Esta vez no fueron traicionados por su líder, pero
los errores ya comentados de Sandino se saldaron con la derrota de la
insurrección. El péndulo de la sociedad nicaragüense giró a la derecha por todo
un período.
La noche del somocismo fue especialmente negra en el
campo. La expansión del algodón arrebató a muchos pequeños propietarios las
mejores tierras y empujó a muchos de ellos, arruinados, hacia las ciudades. Los
que se quedaron fueron condenados a sobrevivir entre el saqueo de la mafia
somocista y la expoliación de la gran burguesía agraria. Ante cualquier
protesta, los gánsteres de la Guardia Nacional y la policía actuaban como brazo
armado del capitalismo en expansión.
La estructura de explotación capitalista en el campo
Nicaragua no era una economía de plantación, como sí lo era su hermana Guatemala; basada en grandes haciendas productoras de banano u otros productos bajo la propiedad directa de multinacionales yanquis como la United Fruit y otras. En el caso nicaragüense predomina la propiedad agraria en manos de propietarios nacionales y ésta se halla más repartida que en los países vecinos. "Nicaragua es, junto con Costa Rica, el país donde las fincas multifamiliares grandes (la gran burguesía agraria) concentran mayor proporción de tierra. Pero al mismo tiempo es el país donde las unidades familiares y multifamiliares medianas (la pequeña y mediana burguesía rural) tienen mayor peso en la estructura de tenencia: casi la mitad del total de unidades, con más de la mitad de la tierra" (Carlos M. Vilas, Perfiles de la revolución sandinista).
Sin embargo, respecto a la distribución de la
producción agropecuaria el campesinado aportaba una cuarta parte del total y la
burguesía mediana casi la mitad. La gran burguesía sólo representaba un tercio
de la producción pero concentraba la mayor parte de las tierras, lo que da
cuenta de su ociosidad. El 65% de los terratenientes ni siquiera habitaban sus
fincas y haciendas. Además, esta gran burguesía parásita tendía a controlar las
redes exportadoras, que era la parte más rentable del negocio. El 70% de la
producción de café destinada al comercio mundial estaba controlada por un
puñado de grandes propietarios.
La expansión del algodón, además de despojar a una
parte de los campesinos más humildes de sus tierras, también tiende a supeditar
al pequeño productor agrario a los grandes propietarios. Entre el 50 y 60% de
la producción algodonera se realizaba en tierras arrendadas a los
terratenientes. Además, miles de pequeños y medianos campesinos se veían
sometidos a los designios de 28 empresas desmontadoras, 11 exportadoras y tres
bancos que en la práctica eran quienes decidían cuánto se producía, a qué
precios, etc. El 75% de las ventas de algodón en rama eran controladas por las
desmontadoras y el 95% de las ventas de algodón oro estaba en manos de
intermediarios.
En el resto de sectores la situación no era muy
diferente: el 50% del mercado de café lo controlaba una sola firma. Un puñado
de grandes compañías imponía sus condiciones a la masa de campesinos
productores. Lo mismo ocurría en la ganadería, donde unos 30.000 productores se
encontraban a merced de cuatro grandes mataderos.
El mecanismo básico de dominación por parte del
imperialismo y la gran burguesía nacional sobre la economía nicaragüense,
además de este control de las empresas transformadoras y comercializadoras,
eran los infinitos y sutiles tentáculos del capital financiero. "Los
productores pequeños no tenían acceso al crédito bancario y dependían del
financiamiento de los comerciantes o del capital agroindustrial, quedando endeudados
por adelantado, entrampados en un sistema de ventas forzosamente anticipadas de
las cosechas, sin capacidad de injerencia en el precio de las mismas".
La reforma agraria de 1981

La revolución sandinista podía y debía haber
nacionalizado toda la tierra y procedido a su reparto a los campesinos. Eso fue
lo que hicieron los bolcheviques en Rusia en 1917 en un contexto parecido, en
el que la demanda de tierras por parte de los campesinos era un clamor. El
efecto de esta medida, como ocurrió entonces en Rusia, hubiese sido el de
establecer una alianza de acero entre la revolución y las masas campesinas.
Esto, unido a una política de créditos blandos y con todo tipo de facilidades
por parte de la banca (que estaba en manos del Estado), además de desarrollar
el agro e incrementar la productividad, habría servido para demostrar a los
campesinos, no con discursos sino con hechos, que el socialismo no significaba
ninguna amenaza a sus pequeñas propiedades, todo lo contrario. Esto habría
segado la hierba bajo los pies de las bandas contrarrevolucionarias financiadas
por el imperialismo estadounidense.
Al mismo tiempo, la revolución podría haber fomentado
con los campesinos más empobrecidos y los jornaleros tanto cooperativas como
explotaciones colectivas de propiedad estatal. La incorporación de los
campesinos a dichas explotaciones sería completamente voluntaria y habría
servido para ir convenciendo paulatinamente a todos los campesinos que así lo
deseasen de las ventajas de trabajar la tierra de forma colectiva y aplicando los
avances tecnológicos más recientes. Esta fue precisamente la posición que
defendieron los marxistas de la Oposición de Izquierdas en la URSS.
Pero la reforma agraria de 1981, al tiempo que dejaba
de repartir tierras a los campesinos, o reducía este reparto a la mínima
expresión, mantenía la mayor parte de los latifundios en manos privadas. Lejos
de ser una reforma agraria socialista era un intento administrativo de hacer
frente a la escasa productividad del campo impulsando granjas estatales pero
sin erradicar el latifundio. Si había alguna concepción ideológica que
inspirase esta reforma no era el marxismo sino las ya comentadas ideas sobre la
economía mixta y, seguramente, la presión y métodos burocráticos de los
asesores soviéticos enviados por la casta burocrática estalinista de la URSS.
El proceso
revolucionario que se inicia en el Imperio zarista en 1905 y culmina en octubre
de 1917 constituye uno de lo fenómenos más importantes del siglo XX. La
transformación fue grandiosa. Un Imperio mastodóntico, gobernado por un
autócrata, se transformó en república federal socialista; una sociedad de
campesinos empobrecidos se elevó a la condición de gran potencia industrial.
Al representar la primera experiencia de revolución
social se convirtió en el modelo de todos los revolucionarios de la centuria:
China, Cuba, bastantes países europeos y africanos intentarían reproducir los
pasos de los soviets rusos. Miles de libros y varias generaciones de
historiadores, politólogos, economistas, sociólogos, ensayistas se han ocupado
del gran acontecimiento.
¿Fue el cambio un accidente, un golpe de fortuna para
unos revolucionarios profesionales que aprovecharon las circunstancias
propicias de la Primera Guerra Mundial? ¿Se trató de un proceso meticulosamente
preparado? ¿O simplemente debe ser considerado el resultado fatal de los
errores del zarismo, un sistema político que permanecía de espaldas a los
cambios del mundo?
El proceso derivó en una dictadura, en el momento en
que Stalin, a la muerte de Lenin, se convirtió en el conductor supremo de la
Revolución. ¿Se trató de una desviación del proceso? Así se había interpretado,
y en abono de esta hipótesis se recogían advertencias de Lenin acerca de las
tendencias autocráticas de Stalin. Pero no es un tema definitivamente resuelto.
Documentación publicada recientemente, después de la apertura de los archivos
soviéticos, muestra que un similar designio dictatorial albergaba Lenin, aunque
la enfermedad no le permitiera materializarlo.
Idea General de la Situación Antes de la Revolución
En el siglo XIX Europa Oriental (Turquía, Rusia, Austria) tenía un economía netamente agraria con una relación laboral de tipo feudal. No había industrias, por lo tanto la burguesía industrial casi no existía. Los grandes terratenientes dueños de extensas zonas de tierras fértiles explotaban a los campesinos. Políticamente Rusia era un imperio conducido por un zar, dueño de un poder absoluto, con decisiones únicas sin cuestionamientos.
Los campesinos que conformaban un 85% de la población
vivían en condiciones de extrema pobreza, al intenso frío se sumaba el hambre y
las pestes debido a su debilidad. Los campesinos comenzaron a organizarse para tratar de
rebelarse contra este sistema injusto y opresor. El gobierno ruso percibía esta
inconformidad popular y decidió iniciar una serie de reformas: a) Social:
abolió la servidumbre y b) Económico: permitió la entrada de capitales
extranjeros para la instalación de industrias, que en realidad fueron muy
pocos. A pesar de estas medidas las gente no mejoró su
estándar de vida y siguió pasando por las mismas penurias. Los campesinos también recibieron el apoyo de una gran
masa de estudiantes y a partir de 1880 comenzaron a fortalecerse para luchar
contra el poder del zar Nicolás.
En 1905 Rusia pierde la guerra con Japón, y el país se
encuentra en una situación de debilidad política, por lo tanto la oposición
aprovecha para crear una revuelta en San Petersburgo, denunciando la
incompetencia del monarca.
Como medida de reacción el zar reprime a los
manifestantes y dispara en las puertas del Palacio de Gobierno, matando a más
de cien hombres y mujeres. También se rebelan los marineros del acorazado
Potemki. De igual manera el zar acepta las quejas y acepta la creación de una
especia de parlamento, llamado Duna que debía trabajar en combinación con el
zar, pero cuando éste fue presionado automáticamente la disolvió. De esta manera las primeras reformas liberales
fracasaron, pues el zar, ni los nobles estaban dispuestos a ceder sus derechos
y privilegios.
Además Rusia había entrado en la primer Guerra Mundial
y su economía estaba estancada debido a los costos de la guerra y a que los
hombres debieron dejar sus tierras para alistarse como soldados. No había comida, combustible, materia prima, etc.
La caída del zarismo
La participación de Rusia en la I Guerra Mundial fue
catastrófica. El hundimiento del zarismo hay que entenderlo en ese contexto:
continuas derrotas, incompetencia militar, pérdidas territoriales, dos millones
de muertos, desmoralización de las tropas, desabastecimiento, subida de los
precios y hambre de la población. El malestar consiguiente favoreció la
aparición de focos de protesta entre el conjunto del pueblo y los grupos de
oposición política.
En febrero de 1917
estallaron en la capital manifestaciones espontáneas de mujeres en demanda de
pan y paz. A estas quejas pronto se sumaron los obreros en huelga y otros grupos
sociales. La represión fue contundente: el ejército sacó sus tropas a la calle,
detuvo manifestantes y la Duma fue clausurada.
Pero las protestas continuaron y llegó un momento en
que los soldados, desobedeciendo a sus superiores, se negaron a disparar sobre
los manifestantes. Era el final del zarismo. Nicolás II tuvo que abdicar y
Rusia se convirtió en una república dirigida por un Gobierno provisional de
carácter liberal-democrático.
En paralelo, resurgió el Soviet de Petrogrado (como
había pasado a llamarse San Petersburgo). Y siguiendo su ejemplo, proliferaron
los soviets de obreros, campesinos y soldados por las ciudades más importantes
del país.
El Gobierno provisional fue incapaz de imponer el
orden y resolver las exigencias sociales cada vez más extendidas: el fin de la
guerra, el abastecimiento de la población y el reparto de tierras entre los
campesinos.
Bolcheviques
Se dio durante la primera guerra mundial, en el año de
1917 Rusia era un país pobre y muerto de hambre porque el Zar Nicolás II le
importaba muy poco el pueblo y mucho del dinero con el que contaba Rusia estaba
en manos del Zar por lo mismo de ser país pobre, no quería entrar en la guerra
porque no tenia los recursos necesarios como para llevarla a cabo, pero tuvo
que entra porque tenia Vínculos diplomáticos y económicos muy fuertes con
Inglaterra y Francia, el pueblo estaba muy inconforme con toda esta situación,
y hubo tres partidos que se aprovecharon de esto: los trudovicos, los
mencheviques y los bolcheviques. Los bolcheviques tienes el deseo de sacar a
Rusia de la guerra y ponerle atencióna su reconstrucción a la cabeza de los
bolcheviques se encontraba Lenin. Un buen día, Lenin junto a los bolcheviques y derrocaron al Zar NicolásII
(luego lo asecinaron junto con su familia) y quedo al mando Trosky, pero éste
tampoco dio resultados deseados y tambien lo quitaron del poder (y escapo a
México) después de eso Lenin tomo el poder, y a pesar de las amenazas de
Francia y de Inglaterra logro sacar a Rusia de la guerra. Crea la URSS (union
de repúblicas socialistas sovieticas) y
pone en marcha su plan de reconstrucción. Después muere y deja a cargo del
poder a su mano derecha: Iósef Stalin.
El fascismo italiano

Benito Mussolini, antiguo militante socialista, era un
ex combatiente que supo conectar con los anhelos de muchos antiguos soldados,
que volvían de la guerra decepcionados y sin trabajo. En poco tiempo Mussolini
creó en Milán la primera agrupación fascista (marzo de 1919), embrión del
Partido Nacional Fascista (1921). El nuevo partido se caracterizaba por su
nacionalismo exacerbado, la voluntad de implantar una dictadura, el uso de una
simbología característica y finalmente, la reivindicación bastante vaga de
cierta reforma social.
Italia estaba sumergida en una grave crisis económica,
el país vivía permanentemente en un clima de enfrentamiento social: los obreros
protagonizaban grandes movimientos huelguísticos en reivindicación de mejoras
salariales, mientras que los campesinos pobres pedían tierras y ocupaban los
latifundios de los terratenientes. Mussolini aprovechó la crisis política en
que vivía Italia para organizar una demostración de fuerza, la Marcha sobre
Roma (octubre de 1922), que consistió en la llegada a esta ciudad de miles de
fascistas procedentes de todos los rincones del país. El rey, impresionado por
la fuerza del fascismo, nombró a Mussolini jefe de gobierno.
Ya en el poder, Mussolini cambió la ley electoral para
ganar con comodidad las elecciones; una vez dispuso de mayoría absoluta,
expulsó del Parlamento a los diputados de la oposición, ilegalizó los partidos
y sindicatos, salvo el fascista y, finalmente, proclamó la dictadura fascista.
Mussolini fue considerado il Duce, “ el caudillo” y gozaba de una poder casi
ilimitado. Desde un punto de vista económico, el fascismo favoreció la
modernización de Italia con la mejora de la agricultura, con las llamadas
batalla del trigo, la construcción de autopistas y ferrocarriles y la creación
de un sector industrial de titularidad pública. El gobierno fascista potenció
la natalidad y aprobó una legislación social que protegía a las clases
trabajadoras en caso de accidente laboral, enfermedad y vejez. Por otra parte
intentó controlar el asociacionismo infantil y juvenil con la creación de
organizaciones que adoctrinaban políticamente a la juventud.
El fascismo alemán: nazismo
En noviembre de 1918 los
obreros y los marineros de la flota de guerra de Alemania encabezaron una
revolución que pedía el fin de la guerra y la democratización del país. El
emperador Guillermo II, falto de apoyo, tuvo que abdicar; de inmediato, se
proclamó la República. La nueva república alemana, que se conocía con el nombre
de República de Weimar porque la constitución se aprobó en esta ciudad, tuvo
que hacer frente a una situación muy crítica derivada de las consecuencias del
trato de Versalles y las reparaciones de guerra. Terminada la guerra, Alemania
se hallaba en una situación caótica. Adolf Hitler ingresó en un pequeño
partido, el Partido Obrero Alemán, del que pronto fue el líder. Este partido
rechazaba el tratado de Versalles, pedía el rearme de Alemania, la unión con
Austria, la participación de los obreros en los beneficios empresariales y
sobre todo, propugnaba un antisemitismo feroz. El partido que poco después se
denominó Partido Obrero Nacionalsocialista Alemán o partido nazi, organizó un
golpe de estado (noviembre de 1923), que fue un completo fracaso. Hitler fue
encarcelado y el nazismo perdió su fuerza inicial.
Pero las cosas cambiaron
radicalmente tras el crac de 1929. Los capitalistas norteamericanos repatriaron
el capital invertido en Alemania, lo cual ocasionó la quiebra de muchas
empresas alemanas, y por consiguiente, la aparición de un amplio número de
parados. Hitler supo aprovecharse del descontento popular: el partido nazi
pronto se convirtió en el grupo mayoritario del Parlamento, y Hitler fue
nombrado canciller. Los nazis aprovecharon el poder conseguido democráticamente
para instaurar una dictadura, de la que Hitler, proclamado Führer,”conductor”,
era el líder indiscutido.
El nuevo régimen,
denominado Tercer Reich , era una dictadura totalitaria que controlaba todos
los aspectos de la vida de los alemanes. Todos los partidos fueron prohibidos,
excepto el nazi y el funcionariado fue depurado. El aspecto más característico
y cruel del nazismo fue su carácter racista y antisemita. Los judíos eran
considerados una raza inferior y degenerada, fueron sometidos a todo tipo de
discriminaciones y vejaciones. Mediante las leyes de Nuremberg, fue desposeídos
de la ciudadanía alemán y se les prohibió el ejercicio de determinadas
actividades profesionales, a la vez que los matrimonios mixtos entre alemanes y
judíos. La noche del 9 a l0 de noviembre de 1938 (<la noche de los cristales
rotos>, los militantes nazis asaltaron los barrios judíos y asesinaron a
cientos de personas. Lo peor, llegó con el estallido de la Segunda Guerra
Mundial, cuando el régimen nazi asesinó en los campos de exterminio unos seis
millones de judíos y de personas de otros grupos étnicos considerados
inferiores.
La Segunda Guerra Mundial
estalló por la actitud del régimen nazi, que gobernaba Alemania desde 1933. De
hecho, Hitler ya había descrito en el libro Mein Kampf, “Mi lucha” los
objetivos de la política exterior del futuro Estado nazi: la anexión de todos
los territorios donde existieran minorías de habla alemana e incluso la
ocupación de regiones históricamente no alemanas pero que tenían un interés
económico y demográfico. Con la llegada de Hitler al poder y el establecimiento
del Tercer Reich, Alemania se preparó para la guerra. Al estallar la Guerra
Civil española, Hitler ayudó de forma decisiva al bando de Franco con material
y soldados. Aún más grave fue la anexión de Austria a Alemania, precedida,
cuatro años antes, del asesinato por parte de los nazis del canciller austríaco
Dollfus por haberse negado a ello. Hitler reivindicó la región de los Sudetes,
zona fronteriza de Checoslovaquia. Francia y el Reino Unido, aliadas de
Checoslovaquia, se opusieron inicialmente a la anexión de este territorio;
durante unas semanas el mundo estuvo a punto de ver el estallido de una guerra,
pero finalmente, en la conferencia de Munich esos dos estados aceptaron la
ocupación de los Sudetes. Pero Hitler no tenía bastante: en marzo de 1939,
ocupó el resto de Checoslovaquia y estableció el protectorado sobre una parte
del país, mientras que la otra, Eslovaquia, se convertía en un estado satélite
de Alemania.
Muy completo y variado, muy útil la información; gracias.
ResponderEliminarexcelente material.gracias.
ResponderEliminar